La Selección Nacional de boxeo inicia la cuenta regresiva para su partida del país hacia el campamento en Cuba y luego de ahí rumbo a Bakú, donde se realizará el Preolímpico, el último escalón para llegar a los Juegos de Rio.
Cada uno de los atletas seleccionados, David Jiménez en los 52 kg, Eduardo Sánchez en 64 kg, Abraham Mora en 69 kg y Jason Ramírez en 75 kg, se han preparado a conciencia y dicen estar prácticamente listos para el nuevo reto. Ya tuvieron una experiencia en Argentina, en el Preolímpico continental, así que ya conocen a lo que se enfrentarán en la eliminatoria mundial.
“La presión la hemos sabido manejar, la preparación ha sido la correcta, esperamos terminar de afinar detalles allá en Cuba donde tendremos buenos sparring, veremos más técnica, estrategia, todos con la mirada puesta en esa clasificación”, dijo David Jiménez, quien acotó que por más que sean cinco plazas por peso nadie puede confiarse.
“Los rivales europeos van mucho al choque, a la corta distancia, sin embargo, no podemos pensar que todos serán iguales, cada selección rota a sus boxeadores, a veces llevan hasta dos o tres por peso y los estilos varían”.
Eduardo Sánchez, por su lado, indicó que ha mejorado en sus movimientos dentro del ring, ya que en suelo argentino se vio estático.
“El profesor me ha ayudado en eso, en que sea más dinámico en la pelea, que no me quede mucho, que maneje mejor ese desplazamiento. Allá en Cuba terminaremos de mejorar todos los detalles con los sparring, para nosotros es como una segunda casa para entrenar”.
La Selección se mantiene a diario entrenando y partirá el próximo 12 de mayo a Cuba. En la isla participarán en el torneo Giraldo Córdoba Cardín del 26 de mayo al 2 de junio y posterior a la competencia viajarán directo a Bakú para tener varios días de adaptación.
